sábado, 13 de octubre de 2012

Un problema de reparto

En el mundo mueren todos los años 10 millones de niños al año de hambre y malnutrición- el equivalente a que cada año explotaran 25 bombas de Hiroshima- y explotan sin producir ruido-. Casi 870 millones sufren subnutrición crónica (de ellos 16 millones en países desarrollados). Cuatro quintas partes de la humanidad pasa hambre, mientras que la otra quinta parte padece enfermedades relacionadas con el exceso de comida.

Foto: ©FAO/Asim HafeezSin embargo la tierra dispone actualmente de recursos para dar de comer a dos o tres veces la población actual. Incluso en los países como Bangladesh donde el hambre es endémica hay recursos para abastecer hasta tres veces su población. Mientras tanto en la Unión Europea y EEUU se dan subvenciones a agricultores y ganaderos para que no produzcan alimentos y cada día se gastan 4.000 millones de dólares en armamento,

La cuestión es: ¿Porqué?


La razón es una enorme concentración de poder económico, político social y cultural en el mundo actual. Unos pocas personas tanto en el Norte como en el Sur controlan o tienen una importante influencia sobre las fuentes económicas, políticas y culturales mundiales ( 80% de los ricos están en el Norte y el 20% restante en el Sur) existiendo una alianza entre todos ellos para que no se produzca una distribución de recursos que afectaría gravemente a sus intereses.

Cada año la brecha entre ricos y pobres lejos de reducirse se agranda, y con la crisis mundial los poderosos están aprovechando para que esta situación se amplifique llevando a cabo políticas de ajustes estructurales que dejan a gran parte de la población bajo el umbral de la pobreza (sólo hay que ver la situación de Grecia, Irlanda y Portugal) y que si no los paramos nos llevarán a la chinarización, esto es, semiesclavitud.

¿Porqué el ser humano es tan despiadado con sus semejantes?¿porqué da igual cómo se encuentren los demás mientras yo viva en la opulencia?. No puedo entenderlo, porque si satisfacemos las necesidades básicas el resto, es puro despilfarro. Los muy ricos no necesitan tal cantidad de dinero, ya que, no podrán gastarse lo que tienen, ni ellos ni sus herederos, aunque vivan numerosas vidas.  Porque ¿qué felicidad puede sentir uno si cuando se acaba el día se para a pensar que 60.000 personas han muerto de la enfermedad mayor que tiene el mundo, que no verán un nuevo amanecer?, sabiendo además que tienen solución: hambre.

En el fondo lo que subyace es un problema de reparto de los recursos existentes en el planeta, y los muy ricos, ese escasísimo porcentaje de la población mundial están año a año aumentando la brecha y perpetuando su posición de dominio. Es demencial.


lunes, 8 de octubre de 2012

¿Quién ha vivido por encima de sus posibilidades?

Nos repiten desde el gobierno hasta la saciedad que "hemos vivido por encima de nuestras posibilidades" durante muchos años, que "hemos abusado entre todos de muchas cosas" y que ahora con la recesión que sufrimos eso ya no es posible.
Pero seamos serios, ¿quién ha vivido por encima de sus posibilidades?, ¿el Estado, las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos?, ¿las familias?, ¿las empresas?, ¿el Gobierno de España?, ¿los políticos?. Y ¿qué quiere decir exactamente vivir por encima de las posibildades?, porque por más que escucho a los políticos que lo afirman y los cantamañanas que se lo creen, ninguno sabe explicar las preguntas que he planteado, a lo sumo ponen algunos ejemplos como aeropuertos que están cerrados, demasiadas autovías, gente que ha pedido hipotecas que se "comen" el sueldo de uno de los miembros de la pareja, abuso del sistema sanitario público, excesivo gasto en la ley de dependencia  y algún otro pobre ejemplo que en nada explican dicha afirmación.

Si tomamos como ejemplo las numerosas obras públicas que no funcionan, están infrautilizadas o se caen a pedazos, lo que habría que pensar es quién pidió que se construyeran y quién se ha beneficiado de su construcción, y concluiremos que han sido políticos y empresarios a fines. En ningún caso los ciudadanos, que han visto cómo el dinero público ha sido dilapidado para enriquecer a unos pocos y no para el interés general.

Si el ejemplo es el de las hipotecas resulta que no todas la familias se endeudaron, ni lo hicieron al mismo nivel ni para los mismos propósitos ya que según datos del Banco del España, la mitad de los hogares no presentaba ningún tipo de deuda al final de la burbuja inmobiliaria. Además los hogares más pobres han recurrido menos al endeudamiento que las más acaudalados, y  la mayoría del endeudamiento contraído por los hogares más pobres se ha destinado a la compra de una vivienda habitual, lo que nos hace pensar en la necesidad de haber adoptado esta decisión a tenor de los elevados precios inmobiliarios y la progresiva pérdida de capacidad adquisitiva (España es el único país de la OCDE en el que los salarios reales sólo se han incrementado el 0.7% en 20 años). Es decir, muchos de estos hogares situados en los estratos más pobres no tuvieron más remedio que acudir al endeudamiento para poder disfrutar de una vivienda en propiedad. Además, una buena parte del endeudamiento contraído por los hogares más ricos (especialmente los situados en el estrato superior) ha sido utilizado para la compra de propiedades inmobiliarias distintas de la vivienda principal, lo cual revela que estas operaciones respondían a motivaciones caprichosas y no a necesidades de primer grado como lo es la compra de vivienda habitual. Y todo ello permitido e impulsado por los bancos, no porque quieran hacer un servicio a la sociedad sin por su ánimo infinito de lucro. Todo lo mencionado se puede comprobar aquí.

Si lo que se piensa es en el "abuso" del sistema sanitario público como gasto excesivo de medicamentos, utilización excesiva del transporte sanitario (ambulancias), turismo sanitario de extranjeros, demasiadas pruebas diagnósticas, etc.. lo que habrá que pedir es que se gestione mejor, que se cambien los mecanismos que los regulan y se mejore, pero no que sean privatizados o instaurado el copago argumentando que ya no se pueden financiar, y sin embargo el Estado español ha prestado y dado dinero a los bancos españoles en un total de 110.000 millones de euros en los últimos cuatro años y el BCE 500.000 millones a bancos españoles e italianos en el último año. Lo que subyace detrás es la destrucción del sistema sanitario público para ser sustituido por seguros privados.

Si el ejemplo es el "excesivo" gasto en la ley de dependencia, hay que decir que es España el Estado del Bienestar está muy poco financiado y desarrollado, aquí van los datos:
  1. España destinaba el 21% del PIB en gasto social (ahora debe ser inferior por los recortes). La media en la Unión Europea del del 27%. En Suecia el 29.3%.
  2. Sólo el 9% de la población adulta trabaja en el Estado el Bienestar frente al 25% de Suecia.
  3. Los ingresos del Estado en España representan el 32% del PIB. La media en la UE es del 44% y en Suecia del 54%.
  4. España no es pobre: el PIB por habitante es del 94% del promedio de los países de la UE de los 15. Tenemos dinero para financiar el déficit social, lo que ocurre es que no se recauda. Esto impide que sea posible el disfrute de derechos sociales básicos reconocidos en la Constitución.
Algunas comunidades dicen que no tienen problemas de financiación, claro porque no han financiado la ley de dependencia y los servicios sociales son escasos.

Lo que se pretende desde la ideología neoliberal es culpabilizarnos de nuestra propia tragedia, cuando en realidad somos las víctimas de lo que ha ocurrido. Desde hace tiempo lo que está ocurriendo es que los muy ricos no contribuyen a financiar el sistema en proporción a lo que poseen, somos los asalariados los que financiamos el sistema, por eso ahora que hay 5.500.000 de parados el sistema no se sostiene.

Debemos concluir que no hemos vivido por encima de nuestras posibilidades sino por debajo de nuestras necesidades. Que la economía debe estar al servicio de las personas y no al revés como está sucediendo.

Y aquí dejo esto, por si  ilumina la mente de alguno...

Tranquilo majete en tu sillón

Ayer domingo tuvo lugar una convocatoria de manifestaciones en todas las principales ciudades de España para pedir al Gobierno un Referendum y rechazar los recortes llevados a cabo. Nadie de mi entorno me acompañó a la manifestación, aunque conozca a varios parados, pensionistas, funcionarios y otros que tienen sobradas razones.

La convocatoria en Ciudad Real tuvo poco seguimiento,  500-1.000 personas, lo cual me dejó perplejo pues teniendo en cuenta que hay 60.300 parados en la provincia digo yo que estarían disfrutando del día de domingo, que siempre es más atrayente y satisfactorio. Claro, ir a una manifestación es muy sacrificado, te estropea los planes para el domingo por la mañana: un paseo por el campo, cazar, hacer senderismo, ir a misa, tomar cañas... en fin miles de actividades que son mucho más importantes que luchar de alguna manera porque esto cambie.Porque ¿qué se consigue con una manifestación comparado con lo que se consigue en el sillón?.¡Donde va a parar!.

Me pregunto ¿cómo cree la gente que vamos a salir de esto?, ¿creen que el año que viene empezaremos a crecer y descenderá el paro como dice el Gobierno?, ¿que los recortes no les afectan?. Debe ser que se lo creen y por eso están tranquilos en su sillón, planificando cómo ver el R.Madrid-Barcelona o en lo que van a hacer el domingo por la tarde.

Pues seguid así, que como dijo en 1945  Martin Niemoeller "Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no hablé porque no era comunista. Después vinieron por los socialistas y los sindicalistas, y yo no hablé porque no era lo uno ni lo otro. Después vinieron por los judíos, y yo no hablé porque no era judío. Después vinieron por mí, y para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí".

La conclusión a la que llegará el Gobierno es que lo están haciendo bien, que están de acuerdo con lo que estamos haciendo y que todavía aguantan mucho más. Nos merecemos lo que nos hagan.

jueves, 4 de octubre de 2012

El puto rescate

Está semana he leído en prensa que un alto dignatario de la UE ha dicho que "los españoles eran reticentes a la petición del rescate pero ahora están preparados para pedirlo". Es decir, el pueblo ya se ha tragado que es la única solución para salir de la situación de recesión. Muchas de la personas que conozco lo ha aceptado como irremediable y necesario, que pasaremos algunas estrecheces más pero al final nos recuperaremos y aquí paz y después gloria. Nada más lejos de la realidad.

Pero la pregunta es: ¿a quién se va a rescatar?. Respuesta: a los bancos para que el sistema financiero se recupere, vuelva el crédito y la economía crezca.

Ahora bien, habría que preguntarse porqué hay que ayudar con dinero público a bancos causantes de la crisis, que desde hace cuatro años se les ha prestado dinero público por miles de millones de euros sin que hayan modificado su comportamiento, esto es, siguen especulando con el dinero y no tasan sus activos tóxicos a precios de mercado engañando a las agencias de calificación en sus balances, ni ha empezado a fluir el crédito. ¿Porqué hay que ayudarles cuando son empresas privadas que cuando ganan muchísimo dinero no invierten en producir bienes y servicios sino que cada año que pasa destinan más cantidad a operaciones especulativas y paraísos fiscales?. ¿Porqué hay que ayudarles si en ninguno de los bancos que tienen agujeros contables se ha producido responsabilidad en sus directivos?.

Nos dicen que si dejamos quebrar a los bancos el sistema económico se hundiría. Lo cual es falso, en España no existen ningún banco sistémico, y si un banco sufre pérdidas existe un orden legal para que éstas sean asumidas por accionistas en primer lugar y bonos subordinados y no garantizados después. Si esto se hiciera existiría un colchón de 700.000 millones (en caso de que quebraran todos los bancos españoles) sin que los depositantes (personas con una cuenta corriente) perdieran ni un euro. Con esa cantidad no se tendría que pedir el famoso rescate, no computaría éste como deuda del Estado, ni habría que hacer ningún tipo de recorte social. Claro que esto supondría reconocer que han sido muy malos gestores y además cuantiosas pérdidas para los mismos directivos, pues poseen gran cantidad de las acciones y bonos de los mencionados.

El Gobierno no deja claro si va o no a pedir el rescate, aunque las filtraciones que se producen a la prensa indican que se están negociando las condiciones a la espalda de la ciudadanía que va a sufrir las consecuencias de las mismas. Porque los prestamistas exigen condiciones (que no condicionalidad) para asegurarse de que el dinero e intereses va a ser devuelto, y para ello quieren que  compute como deuda del Estado, lo que implica más sacrificios para la población: reducción de salarios, aumento de la edad de jubilación, menos prestaciones sociales, sanidad, educación, dependencia, etc..Los ciudadanos tienen derecho como mínimo decidir si debe o no pedirse un rescate a la banca. El gobierno no está legitimado para pedirlo porque el dinero no va a las arcas públicas sino a entidades privadas. Si lo van a pedir debe existir un referéndum y que el pueblo se pronuncie.

Si no se realiza una consulta popular, si se nos impone la petición de rescate, habremos llegado a un Gobierno tirano que como el despotismo ilustrado hacía "todo para el pueblo pero sin el pueblo". Esto no lo podemos consentir, debemos salir a la calle día tras día hasta que les exploten los oídos de tanto escucharnos y como Islandia expulsarlos del poder pacíficamente, llevar a los tribunales a los políticos, redactar una constitución que sea democrática, llevar a los banqueros a la cárcel, nacionalizar bancos para que presten dinero que se utilice en producir bienes y servicios, llevar a cabo políticas expansivas que permitan el crecimiento, etc...es decir que el pueblo sea dueño de su destino.

lunes, 1 de octubre de 2012

..y vuelta la burra al trigo

El gobierno ha decidido que en el próximo año 2013, los funcionarios veamos congelado muestro sueldo otra vez. Es el tercer año consecutivo, lo que unido a las  bajadas de sueldo hacen que a fecha de hoy tengamos una pérdida de poder adquisitivo en Castilla-La Mancha del 20% respecto a 2010.

Habrá muchos que digan que somos unos "privilegiados", "afortunados" y otras cosas parecidas por tener un empleo estable. Sobre esto, hay que señalar que privilegiado es aquel que disfruta de privilegio (exención de una obligación) y afortunado el que tiene fortuna o buena suerte. Pues bien, teniendo que enc uenta que obtuvimos nuestra plaza según igualdad, mérito y capacidad no somos ni lo uno ni lo otro. En todo caso se nos podría catalogar como envidiados o que nuestra situación es envidiable dado la pésima situación económica del país. Y es aquí donde empieza a explicarse que muchas personas se alegren de que nos cogelen y nos bajen el sueldo, porque la envidia es defecto bastante común en los españoles y mala consejera para del raciocinio.

Cuando bancos, promotores, inmobiliarias, constructores y otros muchos negocios se estaban hinchando con los beneficios astronómicos de la burbuja inmobiliaria, nosotros teníamos como mucho subidas anuales el I.P.C. Muchos de los que entonces abandonaban los estudios para trabajar en los negocios de la construcción, se reían de nosotros o se paseaban alegremente con su BMW o Audi, ridiculizando el pasar horas y horas estudiando para ganar "cuatro perras" cuando se aprobara la oposición.

Ahora parece que somos culpables por tener un empleo estable, que tenemos que "arrimar el hombro" o "realizar un esfuerzo" y soportar el deprecio de los que nos gobiernan, que continuamente hacen declaraciones despectivas sobre los empleados públicos.

Que a un funcionario no se le pueda despedir alegremente  es garantía de servir con objetividad los intereses generales y actuar con los principios de eficacia, jerarquía, descentralización, desconcentración y coordinación con sometimiento pleno a la ley y al Derecho. Esto permite que pueda desarrollar su trabajo sin la presión o le miedo de ser despedido si no acata lo dictado por sus superiores (cuando ello vaya en contra de lo establecido legalmente), lo que redunda en beneficio de la sociedad pues el funcionario actuará según la ley y no arbitrariamente.

Nosotros no hemos causado la crisis, y sin embargo acuden a nuestro sueldo como si de una hucha se tratara para salvar las cuentas públicas en vez de buscar donde realmente hay dinero (grandes empresas, evasión de impuestos, grandes rentas, bancos, etc..). Pero el dinero que nos quitan no va a servir  para equilibrar las cuentas públicas (como no lo ha hecho en 2011 y 2012) ni para que se sigan prestando servicios esenciales para la sociedad. Si que va a servir para socavar todavía más nuestra capacidad adquisitiva, y en la medida en que un empleado público está bien retribuido está más motivado y es más dificilmente sobornable.

Quizás lo que pretenden es tener una Administración Pública precaria y mal retribuida para de esta manera justificar privatización de servicios como la Educación y Sanidad que suponen un gran pastel para empresas privadas, ya que, ello es la esencia de la ideología neoliberal que guia al gobierno.